No sé bien
cómo escribirte desde dentro del blog (ya me enseñarás), pues las nuevas
tecnologías me han cogido ya un poco tarde. Por eso te haré, en este mismo
correo, algunas aportaciones o puntos de vista que surgen de mi experiencia de
profesor y del conocimiento de bastantes familias que están en esa tarea
apasionante de educar mejor.
ü Sobre el sentido común: En la educación (como padre o profesor) es imprescindible e incluso prioritario
el sentido común pero, no olvidemos que el sentido común, hay formarle,
trabajarle, organizarle y contrastarle.
El sentido
común se basa en un conocimiento natural, que toda persona tiene, de lo bueno y
lo malo; pero también está influido por lo que nos rodea y por nuestro propio
itinerario vital. Además, en la aplicación a lo concreto, el sentido común
tiene que ir acompañado de conocimientos también concretos: características de
la edad del niño y de su proceso de aprendizaje, naturaleza de lo que le
queremos enseñar, influencias externas sobre ese asunto, experiencias
educativas sobre ello,...
Por eso
creo que el sentido común en la educación tiene que ser continuamente:
·
Formado y
trabajado: buenos
libros (y sencillos), cursos sobre educación, ...
·
Organizado: estableciendo una planificación, estrategia
y evaluación de las acciones educativas que dicta el sentido común.
·
Contrastado: Conocer y reflexionar lo que hacen otros
padres o profesores, y aprender y enseñar continuamente.
ü Entender y obedecer, ¿qué es primero?: ¡Pues, depende! Te comento una
experiencia de la enseñanza de las matemáticas: Por los años 70 los matemáticos franceses propugnaron que los niños
tenían que entender todo lo que fueran ejercitando y así, antes de saber sumar
y restar, tenían que saber cómo era la estructura de los números naturales y
enteros y sus principales propiedades. Se impuso así la enseñanza de la teoría
de conjuntos, a los niños de EGB. El resultado fue nefasto: ni sumar, ni restar
ni relaciones de equivalencia, ni cardinales, ni.....nada. Hubo que rectificar,
pero se tardó 10 años. Un niño tiene que aprender las técnicas de sumar y
restar y más tarde las propiedades y los porqués de lo que ya sabe hacer.
No en todas
las cosas se debe proceder del mismo modo, no hay reglas generales, y menos en
la educación.
Yo creo que lo primero que un niño debe entender,
es que tiene que obedecer a papá y a mamá, porque estos son lo que siempre quieren lo mejor para él: tiene que
confiar en ellos. En segundo lugar, y según vaya siendo posible, se les irá
explicando la bondad de lo se les pide.
Hay una
película que me parece que se llama "Historias del Bronx"; en ella,
el hilo conductor es una frase que el padre va diciendo repetidamente a su hijo
adolescente: lo entenderás más tarde. En la película el padre tuvo razón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario